Queridísima rutina:
Llevamos 12 días de aislamiento. Te escribo para decirte que te echo mucho de menos. Para mí lo peor era caer en tus manos. Los psicólogos dicen que la rutina mata, pero tendrán que cambiar de criterio. Antes estaba de acuerdo, pero ahora te echo tanto tanto de menos que pienso que por qué tenemos que perder las cosas para apreciarlas.
Sueño contigo. En este momento estaba tomando un poco de sol, por eso de la vitamina D y oye....tú en mi pensamiento!! Eres tan necesaria como la comida!!!
Rutina, antes tan odiada y ahora tan añorada.
Por favor, vuelve a nuestras vidas!!! Sin ti no estamos bien!!
Mi canto es para ti...Y VOLVER, VOLVER, VOLVER, A MI RUTINA OTRA VEZ....NOS DEJAMOS HACE TIEMPO, PERO QUIERO QUE LLEGUE EL MOMENTO DE ESTAR OTRA VEZ CONTIGO!!
Perdónanos por no apreciarte como te mereces. No lo volveremos a hacer nunca. No tenías que ponernos a prueba de esta manera. ES DEMASIADO DURO!!!