Con canciones atemporales, llevadas a su tono y ejecutadas a su manera, los cinco componentes de "El Sotanillo" llenaron de música entrañable una noche más de los Veranos Culturales de la Asociación, el pasado sábado en el patio de doña Leoncia, ante un público entregado que supo disfrutar de la velada.

Muchos años y mucha experiencia a sus espaldas avalan a esta agrupación musical por la que, a lo largo de su trayectoria ha pasado un gran número de personas, y que un día decidió convertirse en asociación para salvaguardar su identidad. Desde siempre, y más ahora, son amigos de voces templadas, recias y entonadas que se juntan para disfrutar de lo que les gusta, la música; huyendo de los escenarios grandes en busca de la complicidad y cercanía del auditorio, del tú a tú con el público, al que gustan de explicar la génesis y procedencia de las canciones de su repertorio. Canciones que de una u otra formaban han calado en su sensibilidad y reciclan para ejecutarlas a su manera personal de interpretar.

Entre la selección de temas que ofrecieron se pudieron escuchar los boleros eternos, versiones de Atahuelapa Yupanqui, los míticos Llopis, los Crag, los Secretos y algunos de la legendaria formación de la Mandrágora, incluyendo la irreverente versión de "Man gave name to all the animals", de Bob Dylan.

La Asociación Cultural le agradece a "El Sotanillo" su aportación desinteresada para llenar de contenido sus Veranos Culturales y hacer disfrutar de la música en la pausa de las noches estivales.